RESUMEN MITOLOGICO
Página 1 de 1.
RESUMEN MITOLOGICO
RESUMEN MITOLÓGICO
Los Dos Mundos
El Universo es el conjunto formado por dos mundos: Aharon, mundo de dura roca con una niebla permanente en el que habitan los dioses, e Ilieth, un mundo de islas y grandes océanos donde habitan los mortales.
Cómo surgieron los Dioses
Alea es la Diosa Creadora de Aharon. Fue la primera pobladora del universo y creó a los dioses mayores. Una vez creados estos, los demás dioses (menores y semidioses) fueron surgiendo por las necesidades y caprichos de los dioses mayores. Alea pasó a ser la Diosa Reina de todos los mundos; durante eones se comportó como jueza, resolviendo las disputas de los demás dioses. No hizo nada más, permaneció sentada en su trono de piedra escuchando a sus hijos y determinando quién tenía la razón, o cómo se debía resolver un conflicto.
Cómo se creó Ilieth
Ulein creo el mundo con la ayuda de las 4 diosas elementales, entremezclando los poderes de cada una en un complicado equilibrio que, aunque estable, es delicado.
Annya, Orek y Jessuel, interesados por la obra de Ulein le hicieron cada uno un regalo con su esencia, 3 libros que escondían el secreto de la vida, la muerte y la magia, para que los empleara a su voluntad. Ulein los leyó con mimo y entonó su salmodia sobre el mundo que acababa de hacer, creando así los animales, su ciclo de vida y muerte, sus instintos de supervivencia.... De este modo Ulein es también la diosa del equilibrio entre la vida y la muerte, aceptando ambos como parte del equilibrio que ella misma ha impuesto en Ilieth.
Tras un largo periodo de tiempo creando toda la fauna y la flora en el mundo Ulein, algo cansada ya, decidió crear el sol para iluminar su obra, pero dejó que este solo se asomara durante ciertas horas cada día creando los ciclos de día y noche... pero en su necesidad de crear un equilibrio dedujo que la oscuridad se hallaba extendida por mas lugares que la luz, ya que a las cavernas no llegaba la luminosidad del sol, y creo a la luna y las estrellas, para q, en ocasiones, el dominio de la oscuridad no fuera tan absoluto.
Annya, Orek y Jessuel observaron atentos cómo Ulein utilizaba sus regalos y asintieron satisfechos. Ulein, agotada ya, les invito a unirse a ella en el empeño de creación de los seres que poblarían Ilieth desde aquel entonces.
Es conocida desde tiempos inmemoriales las rencillas que existen entre Orek y Annya, y la creación que les había encomendado Ulein no iba a ser una excepción a la hora de pelearse. Annya comenzó creando a los elfos y Orek tomó a unos pocos y los recluyo en oscuras cuevas, tornando su piel del color de la noche y sus ojos rojos de odio e ira hacia sus primos. Ella continuó creando a los enanos y Orek hizo repitió la operación creando a sus antagonistas para causar la muerte de los mismos. Así sucesivamente creando diversas razas, siempre y sin darse cuenta dentro del equilibrio que había dictado Ulein, hasta que cayeron agotados por el esfuerzo y se retiraron a descansar junto a su hermana.
Jessuel se había mantenido al margen, observando una pelea que le parecía absurda, jamás se metía entre ellos, divertido por la cantidad de cosas que eran capaces de realizar cada uno por fastidiar al otro, y pensaba que era el único consciente de que la vida no podía existir sin la muerte y la muerte no podía existir sin la vida. Negando con la cabeza y suspirando al tiempo se decidió a crear una única nueva raza. Una raza superior dotada de la mas poderosa de las magias. Extrajo un poco de su propia esencia y la moldeo dotándola de cuerpo y mente. Mientras sus hermanos habían dividido sus esfuerzos en crear muchas y diversas razas, el creo una única raza, mas poderosa que ninguna y mas imponente que cualquiera: Los dragones, dotados de la mismísima esencia de Jessuel, con una vida larga y casi ilimitada tomada de los hilillos que había dejado Annya descuidadamente en el lugar donde se había peleado con Orek. Puso todos su esfuerzos en que esta raza fuera casi perfecta, y hay que reconocer que lo consiguió, casi perfecta... pero muy escasa.
Los Dos Mundos
El Universo es el conjunto formado por dos mundos: Aharon, mundo de dura roca con una niebla permanente en el que habitan los dioses, e Ilieth, un mundo de islas y grandes océanos donde habitan los mortales.
Cómo surgieron los Dioses
Alea es la Diosa Creadora de Aharon. Fue la primera pobladora del universo y creó a los dioses mayores. Una vez creados estos, los demás dioses (menores y semidioses) fueron surgiendo por las necesidades y caprichos de los dioses mayores. Alea pasó a ser la Diosa Reina de todos los mundos; durante eones se comportó como jueza, resolviendo las disputas de los demás dioses. No hizo nada más, permaneció sentada en su trono de piedra escuchando a sus hijos y determinando quién tenía la razón, o cómo se debía resolver un conflicto.
Cómo se creó Ilieth
Ulein creo el mundo con la ayuda de las 4 diosas elementales, entremezclando los poderes de cada una en un complicado equilibrio que, aunque estable, es delicado.
Annya, Orek y Jessuel, interesados por la obra de Ulein le hicieron cada uno un regalo con su esencia, 3 libros que escondían el secreto de la vida, la muerte y la magia, para que los empleara a su voluntad. Ulein los leyó con mimo y entonó su salmodia sobre el mundo que acababa de hacer, creando así los animales, su ciclo de vida y muerte, sus instintos de supervivencia.... De este modo Ulein es también la diosa del equilibrio entre la vida y la muerte, aceptando ambos como parte del equilibrio que ella misma ha impuesto en Ilieth.
Tras un largo periodo de tiempo creando toda la fauna y la flora en el mundo Ulein, algo cansada ya, decidió crear el sol para iluminar su obra, pero dejó que este solo se asomara durante ciertas horas cada día creando los ciclos de día y noche... pero en su necesidad de crear un equilibrio dedujo que la oscuridad se hallaba extendida por mas lugares que la luz, ya que a las cavernas no llegaba la luminosidad del sol, y creo a la luna y las estrellas, para q, en ocasiones, el dominio de la oscuridad no fuera tan absoluto.
Annya, Orek y Jessuel observaron atentos cómo Ulein utilizaba sus regalos y asintieron satisfechos. Ulein, agotada ya, les invito a unirse a ella en el empeño de creación de los seres que poblarían Ilieth desde aquel entonces.
Es conocida desde tiempos inmemoriales las rencillas que existen entre Orek y Annya, y la creación que les había encomendado Ulein no iba a ser una excepción a la hora de pelearse. Annya comenzó creando a los elfos y Orek tomó a unos pocos y los recluyo en oscuras cuevas, tornando su piel del color de la noche y sus ojos rojos de odio e ira hacia sus primos. Ella continuó creando a los enanos y Orek hizo repitió la operación creando a sus antagonistas para causar la muerte de los mismos. Así sucesivamente creando diversas razas, siempre y sin darse cuenta dentro del equilibrio que había dictado Ulein, hasta que cayeron agotados por el esfuerzo y se retiraron a descansar junto a su hermana.
Jessuel se había mantenido al margen, observando una pelea que le parecía absurda, jamás se metía entre ellos, divertido por la cantidad de cosas que eran capaces de realizar cada uno por fastidiar al otro, y pensaba que era el único consciente de que la vida no podía existir sin la muerte y la muerte no podía existir sin la vida. Negando con la cabeza y suspirando al tiempo se decidió a crear una única nueva raza. Una raza superior dotada de la mas poderosa de las magias. Extrajo un poco de su propia esencia y la moldeo dotándola de cuerpo y mente. Mientras sus hermanos habían dividido sus esfuerzos en crear muchas y diversas razas, el creo una única raza, mas poderosa que ninguna y mas imponente que cualquiera: Los dragones, dotados de la mismísima esencia de Jessuel, con una vida larga y casi ilimitada tomada de los hilillos que había dejado Annya descuidadamente en el lugar donde se había peleado con Orek. Puso todos su esfuerzos en que esta raza fuera casi perfecta, y hay que reconocer que lo consiguió, casi perfecta... pero muy escasa.
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.